Los hombres con sobrepeso en la adolescencia serían más propensos a desarrollar un daño del músculo cardíaco poco frecuente que puede causar insuficiencia cardíaca respecto de aquellos con un peso adolescente mássaludable, según sugiere un estudio de Suecia.
Los autores analizaron información sobre altura, peso y aptitud física de más de 1,6 millones de hombres que ingresaron al servicio militar obligatorio de ese país en el período 1969-2005, cuando tenían 18 y 19 años. El 10% tenía sobrepeso y el 2%, obesidad.
Luego de 27 años, 4477 tenían una cardiomiopatía, que hace que el corazón se tenga que esforzar para bombear sangre. Esto puede causar la insuficiencia cardíaca.
Los hombres con un peso saludable levemente alto en la adolescencia eran un 38% más propensos a tener una cardiomiopatía que aquellos con un peso adolescente en el medio del rango considerado saludable. En cambio, el sobrepeso en la adolescencia por lo menos aumentaba dos veces el riesgo de desarrollar ese daño del músculo cardíaco, mientras que la obesidad multiplicaba cinco veces esa posibilidad.
Los hombres con cardiomiopatía tenían unos 46 años cuando les diagnosticaron la condición.
"Planteamos que el aumento de las tasas de insuficiencia cardíaca en los jóvenes podría atribuirse al crecimiento del sobrepeso y la obesidad", dijo la autora principal, doctora Annika Rosengren, de la Academia Sahlgrenska y la Universidad de Gotemburgo, Suecia. "Pudimos demostrar que había un nexo muy fuerte entre la obesidad juvenil y la aparición temprana de la insuficiencia cardíaca".
Aun así, la cardiomiopatía sigue siendo poco frecuente y en el estudio se le diagnosticó alguna de sus formas a apenas el 0,27% de los participantes.
Las personas con un IMC menor que 20, sin grasa corporal, pero dentro de un rango de peso saludable, tenían bajo riesgo de desarrollar cardiomiopatía, según publican los autores en Circulation. Aun así, ese riesgo creció de manera sostenida con el peso corporal, incluso en los hombres con un peso alto dentro del rango saludable, pero con un IMC de entre 22,5 y 25.
El estudio no se diseñó para demostrar si o cómo la obesidad causa la cardiomiopatía. Tampoco se sabe si los resultados del estudio se aplicarían a las mujeres u otras etnias, según aclaran los autores.
